Encuentro casual en una visita guiada a la nueva Alhóndiga de Bilbao

Cada uno por su lado se habían apuntado para realizar una visita guiada a la nueva Alhóndiga de Bilbao (como otros 6.998 bilbaínos), 43.000 m2 de instalaciones culturales, deportivas y de ocio en pleno centro de la Villa, en lo que fue su gran almacén de vinos hasta hace 33 años, y desde entonces ... el desuso, la amenaza de ruina y un gran espacio desaprovechado.

Pues bien, hoy, a eso de las 8 de la tarde Juan Carlos y Fernando se han encontrado en el atrio de la Alhóndiga (http://www.alhondigabilbao.com/), una superficie diáfana de 6.000 metros cuadrados en la que llaman la atención las 43 columnas diferentes que recuerdan otros tantos estilos arquitectónicos (la columna china la tenéis de fondo), y también la luz cenital que llega a través de la piscina acristalada que hay en el ático ...

Y como aun faltan tres semanas para que las autoridades corten la cinta de la inauguración oficial y más de nueve meses para que se ponga en uso completo, aquello era un hervidero de trabajadores apurando pequeños y grandes detalles, tantos que, de entrada, nos obligaron a firmar un documento (¡ay, la responsabilidad civil!) y a ponernos un casco de obra ... afortunadamente Juan Carlos tiene un buen móvil que logró con poca luz (y sobre todo gracias a la pericia de su mujer) obtener la instantánea que inmortaliza el momento y, de paso, ilustra este post.

Una panorámica más amplia del atrio con su columna china, procedente de la portada de El Correo del 20 de abril, la tenéis pinchando aquí.